Curtis Doiron: "Chile es un mercado importante para las navieras"

Las operaciones de DP World en Chile tendrán un  cierre de año positivo, aunque desde la compañía -que opera en los puertos de San Antonio y Lirquén-, miran este escenario con cautela. Lo anterior, no solo, porque 2023 fue un año más débil, sino también por el aumento de costos y por lo expuesto que el país a los cambios económicos internos y externos.En conversación con PortalPortuario, Curtis Doiron, CEO de DP World Chile, se refirió a estas materias, además de proyectar algunos aspectos que traerá 2025 y cómo se comportará el sector naviero respecto del país tras la entrada en operaciones del Puerto de Chancay, en Perú.

¿Cómo evalúa 2024 en relación a las operaciones de DP World en Chile?

Nuestras operaciones portuarias en Lirquén experimentaron un año de crecimiento en los volúmenes de carga como resultado de una mayor demanda de nuestros servicios por parte de exportadores e importadores regionales. Los volúmenes de contenedores alcanzarán un récord y la demanda de carga no contenerizada se mantiene estable. Seguimos afrontando retos debido al aumento de los costos operativos en energía, combustible y debido a la inflación. San Antonio también tendrá un año récord en el volumen de contenedores, mientras que la carga no contenerizada también se mantiene estable frente a 2023. Sin embargo, es importante señalar que si bien hemos experimentado un crecimiento en comparación con el año anterior, 2023 fue un año muy desafiante en volúmenes de carga.

¿A qué se debe esto?

Los volúmenes de carga de importación de Chile se han mantenido relativamente planos en los últimos 6-7 años, lo que refleja los desafíos económicos a los que se enfrenta el país. Como principal puerta de entrada comercial de Chile, San Antonio es muy sensible a los cambios en la economía y esto sigue siendo una de nuestras principales preocupaciones. Al igual que Lirquen, San Antonio también se enfrenta a elevados aumentos de los costos operativos debidos a cada, el combustible y la inflación, entre otros.

Un hito del año fue la puesta en marcha de una instalación logística ¿Qué viene en relación a esto?

Nos complace que nuestra instalación logística, 

Basándose en su experiencia en el sector, ¿a qué se debe prestar atención y poner foco durante 2025 en materia portuaria y marítima?

Seguimos colaborando estrechamente con nuestros socios y las autoridades de San Antonio para mejorar el nivel de servicio y fiabilidad. Soy optimista y creo que 2025 será un año en el que se reducirá la frecuencia de los cierres portuarios y mejorará la fluidez dentro y fuera de los puertos gracias a las diversas iniciativas en las que DP World, sus socios y las autoridades están trabajando. Continuará la construcción de la Terminal Barrancas, un proyecto clave que aportará opcionalidad y seguridad de carga a los cargadores que utilicen el Puerto de San Antonio.

Todo parece indicar que, al menos al principio, Chancay no será “el monstruo come galletas” que se pintó desde Perú. ¿Qué debería pasar con los puertos chilenos y de los países vecinos a medida que este nuevo puerto se consolide?

Como sabemos, Chancay atiende al mercado peruano y se está posicionando como una puerta de transbordo para la costa oeste de Sudamérica. Aunque está por verse si esta visión de transbordo podría hacerse realidad, no espero que tenga un impacto material en los puertos que operamos en Chile a corto plazo. Chile es un mercado importante para las navieras, y espero que sigan atendiendo este mercado en el futuro. La cuestión es cómo las decisiones sobre la red de las navieras se toman en función de los costos y la eficacia operativa.

¿Qué quiere decir esto en la práctica?

Dado que Chile se encuentra al final de los itinerarios de las navieras, es fundamental que los puertos chilenos ofrezcan un servicio fiable y eficaz. Cuando no podemos hacerlo debido a cierres de puertos, por ejemplo, las navieras cancelan las escalas de los buques en Chile y dejan la carga chilena en otros puertos como Callao o Chancay. Si esto ocurre repetidamente, tendría sentido que las navieras decidieran eliminar definitivamente a Chile de sus itinerarios principales y atender este mercado con buques alimentadores más pequeños que transborden la carga por puertos peruanos. Si esto se hace, podría añadir costos y tiempo adicionales para la carga chilena, y podría dar lugar a que los exportadores chilenos como los de frutaperdieran una ventaja competitiva frente a los peruanos. Por lo tanto, nuestra prioridad debe ser fomentar e implementar medidas para asegurar que los puertos permanezcan abiertos tanto como sea posible, y que estén operando de manera segura y productiva. Afortunadamente, San Antonio tiene capacidad disponible para satisfacer la demanda de carga durante la próxima década, por lo que si podemos abordar la fiabilidad, estaremos bien posicionados para satisfacer la demanda actual y futura.

DP World ha logrado consolidar una red de puertos alrededor de Sudamérica, y también tiene una posición de transbordo en el Caribe. ¿Es esto una ventaja competitiva frente a la irrupción de grandes actores como las navieras que están entrando a la operación de terminales en la Región? ¿Qué otros proyectos tiene DP World en cartera y qué veremos en Chile en los próximos años?

Seguimos centrándonos en desarrollar las capacidades de nuestra red para ofrecer el mejor servicio a nuestros clientes. Nuestros clientes nos dicen que valoran la red que hemos construido, de modo que cuando se producen interrupciones inevitables, somos capaces de ajustarnos dentro de nuestra red para ayudar a nuestros clientes a recuperarse sin problemas. Este es el valor de trabajar con DP World, y seguimos evaluando cómo podemos mejorar y aumentar nuestras capacidades en América y en todo el mundo.